Foto: Ruth Croft en acción / Copy: Ruth Croft

Según el Garmin de la neozelandesa corrió más de 43km a una media de 3’33’’/km..

Ganadora de la CCC del UTMB 2015, podio en Transvulcania 2016, 1ª en Marató Pirineu y Gran Trail Templiers en 2017, podio en Zegama Aizkorri 2018, y también el año pasado, ganadora de Spedgoat 50K, Marathon du Mont Blanc y OCC del UTMB.Estos solo son algunos de los mejores resultados de Ruth Croft, hoy día, una de las corredoras de montaña más fuertes del planeta.

Queda patente que a sus 30 años ya ha ganado algunas de las mejores carreras del mundo y fiel a su autoexigencia, sigue pensando en superarse. En este sentido, el pasado mes de marzo participaba en el Maratón de Seúl en la que completó el recorrido tras poco más de 2h34’ (a menos de 3’40’’/km). Un ritmo descomunal para una mujer cuya especialidad es correr por la montaña. Pocas corremontes de nivel mundial pueden alcanzar esta marca hoy día.

Curiosamente, este fabuloso registro le ha dado pie a clasificarse para el Campeonato del Mundo de Maratón que la IAAF organiza en Doha el próximo mes de septiembre, pero fiel a su deporte (la carrera por montaña) al que denomina en redes sociales como “su primer amor” (y también por lealtad a sus patrocinadores, Scott y Garmin) ha decidido prescindir de esta importante cita y seguir enfocada en la montaña. Esta es la razón por la que tendremos la suerte de verla defendiendo los colores de su país, Nueva Zelanda, en el Campeonato del Mundo de Trail Running que la IAAF organiza en Portugal el próximo 8 de junio.

Los datos del Garmin de Ruth Croft no dan pie a la duda / Copy: Ruth Croft

Con su gran bagaje en la montaña y con lo sobrada de ritmo que va en los 42km sobre asfalto, Ruth será una de las rivales más feroces de otras favoritas como Ragna Debats o la mismísima Azara García de los Salmones.

Uno de los secretos de Croft es confiar en su entrenador y mantener siempre la motivación a tope para estar realmente convencida de querer y poder competir al 100%. Para esto, intenta no correr siempre las mismas carreras y medir muy bien el número de pruebas al año en las que se pincha el dorsal.
Por otro lado tiene claro que hasta que se vea rápida, no pasará de los 80km en una carrera, una decisión muy inteligente.