Foto: Kilian ganando en Pikes Peak 2019 sin récord/ Copy: Org. Pikes Peak

Maude Mathys también ganó y firmó un nuevo récord de la prueba americana, rebajando en casi 13 minutos el registro de Megan Kimmel..

Kilian Jornet demostró ayer domingo en la Pikes Peak Marathon lo que muchos nos temíamos: “Todavía no ha nacido el corredor que pueda batir las 3h16’39’’ que Matt Carpenter” estableció en 1993.

Tras su exhibición en Sierre Zinal y esta vez sí, batir el récord que desde 2003 tenía Jonathan Wyatt en la prestigiosa prueba suiza, todo parecía indicar que el estado de forma de Jornet era el más atlético que ha tenido nunca. Todos sabemos que Kilian es el más resistente pero había demostrado que ahora también era veloz y que además podía ‘resistir’ una altísima velocidad por espacio de 2-3 horas. Sus entrenamientos y sus prestaciones en la prueba suiza así lo demostraron.

En este sentido, y como preveíamos, la Pikes Peak Marathon 2019 tuvo su foco de atención en la posibilidad de si Kilian sería capaz de batir un récord (para mí fantasma, galáctico o imposible) de Matt Carpenter. Carpenter ya es un corredor retirado, que tuvo sus años más álgidos entre finales de los 90 y principios del 2000. Casi oriundo de Manitou Spring (localidad desde donde parte esta longeva prueba y en la que vive desde 1998) conoce el Barr Trail (sendero por el que se traza la prueba) mejor que el salón de su casa, poseee unas grandes facultades fisiológicas (un motor parecido al de Kilian al movilizar hasta 90 ml/kg/min) y en su día venció en importantes trails americanos (bastantes veces esta Pikes Peak Marathon) y maratones disputados en altitud. Hace 6 años fue ingresado en el Salón de la Fama de Colorado Spring por sus logros.

Un potente Kilian Jornet que no pudo con el récord de Carpenter en Pikes Peak 2019

Las cifras que Jornet tenía que superar eran casi ‘imposibles’:

Ascender 21km con 2.382 + en 2h01’ (implica correr a una media de 6’/km con una pendiente media del 10-11%) para descender por el mismo camino y parar el crono de bajada en 1h15’ (3’34’’/km). Todo esto con una dosis de altitud que a más de uno le afectarían en la última hora de ascenso (la cumbre del Pikes Peak se levanta a 4.302 metros).

Y aunque el de Salomon lo intentó, fue el líder absoluto de carrera en todo momento y volvió a ganar tras su concurso + victoria allá por 2012, no pudo con Carpenter. Algunos pensábamos que aunque el lap de ascenso era ‘imposible’ (en su día ni grandes escaladores en altitud como Ricardo Mejía lo lograron mejorar) algunos pensábamos que un ‘milagro’ podía hacer que Kilian se dejara 3-4 minutos subiendo (cororan en 2h05’) para luego poner el turbo y bajar en 1h10’ (Dakota Jones sí fue capaz de descender el año pasado en 1h13’). Pero ni de estas. Un lap de ascenso de 2h09’12’’ no auguraba lo mejor (8 minutos de retraso respecto al récord) y tras un descenso en 1h18’15’’, Jornet firmó un gran registro de 3h27’29’’ (todo lo que sea bajar de 3h30’ lo es) y pese a rebajar en 13 minutos su marca de 2012, todavía se quedó a 11 minutos de la sideral plusmarca de Carpenter.

“He salido con muchas ganas desde el inicio a pesar de que las piernas no iban ligeras. De todas formas de cardio me he encontrado muy bien y esto me ha permitido coger una ventaja cómoda desde el principio y poder controlar la distancia respecto a Sage y Marc» decía Kilian en la nota de prensa que nos envían desde Salomon. Precisamente Sage Canaday y Marc Lauenstein fueron 2º y 3º, con 3h39’05’’ y 3h40’31’’.

Buena carrera de Aritz Egea que llegaba en una gran 4ª plaza en 3h45’56’’, tras coronar en 2h21’14’’.

Quizás sería bueno intentar entrevistar a Matt Carpenter sobre su actuación en 1993, todo parece indicar que su alto conocimiento de la ruta le podrías haber llevado a realizar algunos desvíos o rectos para ganar tiempo, sobre todo en el ascenso donde su lap parece de otro planeta..

Pasando al plano femenino, la que sí que se llevó el récord en esta 64º Pikes Peak Marathon fue Maude Mathys. La intratable corremontes y esquiadora suiza volvió a demostrar que en carrera por montaña poco técnicas y de 2-4 horas de duración, es la mejor del mundo. Mathys llegó a meta por delante de corredores de la talla de Remi Bonnet, Karl Egloff o Max King, si no que rebajó de 4h15’04’’ a 4h02’41’’ la anterior plusmarca de Megan Kimmel, algo sencillamente espectacular.

Tras ella, Yngvild Kaspersen y Meg Mackenzie completaron el podio con 4h27’26’’ y 4h32’19’’, respectivamente.
La española Eli Gordon también fue de la partida, llegando 5º a 41’ de la vencedora.

Maude Mathys rebajó en 13 minutos la anterior plusmarca de Pikes Peak Marathon. Por su pasado y actual rendimiento, en Infotrail tenemos a la suiza en «cuarentena»..

Respecto a Maude Mathys, un apunte que no hay que olvidar:

A finales de 2015 la suiza fue amonestada por el uso de clomifeno, un modulador hormonal y metabólico utilizado para estimular la ovulación y que figuraba en la sección S4 de la Lista Prohibida de la AMA (Agencia Mundial Antidopaje). Mathys dio positivo durante dos controles (en marzo de 2015, en el Cto del Mundo de Esquí de Montaña) y de nuevo en un control en su domicilio. Por esta razón, mano dura del organismo que regula el Doping en Suiza: decidió quitarle los resultados y medallas de aquel Campeonato: 2ª individual, por equipos y relevos, además de obligarle a pagar casi 2000€ por el coste del análisis y procedimientos. Respeto a la sanción, vemos que entre 2015-2016 hay un ‘break’ por maternidad, no sabemos si en este tiempo también cumplió la sanción correspondiente.

Clasificación Pikes Peak Marathon 2019