Foto: Kilian Jornet en acción en Zegama-Aizkorri / Copy: Org. Zegama Aizkorri

Analizamos el potencial del favorito, las variables de rendimiento y la perfecta estrategia que siguió el noruego para conseguir el récord de 3h45’08’’.

Poco más de 24 horas para que la Zegama Aizkorri eche a andar y no hay duda que hay dos grandes expectativas e incógnitas alrededor del que es el mejor maratón maratón de montaña del mundo.
Por un lado sí Kilian Jornet podrá recuperar su txapela de Campeón tras dos años de ausencia en la prueba vasca, y por otro si será capaz de atacar el récord de 3h45’08’’ que en 2017 establecía Stian Angermund-Vik.

Estaremos de acuerdo en que parece ser que Kilian ha pasado un invierno algo atípico en él. Apenas ha competido en invierno en skimo, y parece que se ha centrado en correr y entrenar algo más que otros años. El resumen de todo esto son los números a modo de series de 5K que ha colgado en sus redes sociales, así como alguna otra carrera de esta distancia en la que ha competido a ritmos de casi 3’/km.

En este sentido, objetivamente Kilian está rápido y muy motivado en los pocos pero selectos objetivos que ha elegido esta temporada (básicamente las prestigiosas carreras que conforman las Golden Trail Series) y seguramente con el fin de subir un punto más su calidad pura y arrasar’ con actuaciones y cronos de alucinantes allí donde vaya (Sierre Zinal, Marathon du Mont Blanc, Pikes Peak etc..).

Normalmente Jornet es de los que corre de menos a más, yendo en grupo hasta que dice basta y empujando a tope en los finales de carrera. No tenemos ni idea de cómo piensa afrontar este domingo su particular Zegama pero se nos ocurre alguna que otra variable que podría influir para bien o para mal en su actuación:

La primera la presencia de Oier Arinabarreta, su gran estado de forma y su agresivo estilo de correr. Ya sabemos cómo se las gasta este gran corredor vasco que ha firmado 2h19’ en maratón de asfalto y ha ganado las dos última carreras por montaña FEDME en la que ha competido (la última dándole el título de Campeón de España). Estoy seguros que a Oier no le importará quien está a su lado en la partida y pondrá un frenético ritmo que obligará a todos a correr y mucho desde el primer metro. Esto podría ayudar (o no) a Kilian a ir coleccionando ventaja respecto a los parciales récord de Stian y si está fuerte aguantar hasta el final.

La segunda, el calor que parece que este domingo hará en Zegama. No hay discusión al decir que objetivamente el calor no beneficia a nadie a la hora de sacar su máximo rendimiento en carrera. El cuerpo se recalienta y fisiológicamente no suma, sino resta velocidad de carrera. Kilian está más bien acostumbrado a correr entre 5-10ºC ( o menos) que con 20 ºC más en el termómetro. Además de este condicionante de rendimiento, el protocolo de avituallamiento o hidratación se complica más, con calor. La frecuencia y la cantidad de líquido a ingerir es mayor y más frecuente. Si pensamos a los altos ritmos a los que corren estos fenómenos y lo concentrados que van en carrera, es muy posible que se olviden de beber en las primeras horas, con las negativas consecuencias que esto implica.

Mi respuesta a la pregunta de si Kilian podría mejorar el récord de Stian este domingo, es Sí. Está motivado, ha competido poco esquiando, ha entrenado más corriendo (igual es la vez que más preparado llega a Zegama en cuanto a carrera a pie) y encima parece ser que está rápido y fuerte (no recuerdo en los últimos años que publicara en sus redes sociales los ritmos de sus series en llano). Los únicos matices que planteo, son dos:

1/ Si se hace realidad la temperatura que dicen que puede hacer en Zegama el domingo, entre 25-30ºC con humedad de entre el 50-70%, y 20ºC a 1500 metros sobre mediodía, lo va a tener más difícil.
2/ Si sale a trochel detrás de Oier y alguno más podría desestabilizarse y llegar a las últimas secciones de carrera donde se puede correr de verdad más fundido que menos. Pese a tener aguante y estar fuerte, lo tendría más complicado para batir la marca de Stian (sabemos que de más a menos siempre es más difícil).

¿Por qué digo lo anterior?
Porque si analizamos la actuación que se marcó Stian Angermund Vik en 2017 que le supuso parar el crono en las estratosféricas 3h45’08’’, veréis que hizo una carrera total y radicalmente de ‘menos a más‘:

-Llegó al km 8’7 Ultzama el 10º y a más de 2 minutos de los líderes de carrera ( Aritz Egea y Marco de Gasperi)
-Paso el km16 de Aratz el 8º pero cediendo 3 minutos a los líderes.
-En St, Spiritu 19’7km, ya era 5ª, siguiendo con 3 minutos de desventaja.
-El ascenso al Aizkorri fue clave: remontó casi los 3 minutos en los 2’5km de subida. Llegó arriba 3º pero a pocos segundos de la cabeza.
-Un poco más allá de Aizkorri se puso líder y ya voló hasta meta con un parcial brutal de aproximadamente 1h34’..

La carrera de Stian comenzó con 1h48’ en sus piernas, subiendo a Aizkorri como un rayo y rematando la faena al final con un veloz parcial en los últimos 20km.
Estoy seguro que con lo fuerte que parece que llega Kilian, esta manera de gestionar la carrera le puede venir ‘de perilla’.

La respuesta: este domingo antes de las 12h45′ de la mañana…